Un grupo de expertas independientes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) denunció que, en España y en otros países, hay jueces que no solo desconocen las pruebas de abusos a niñas y niños por parte de sus padres sino que además les otorgan la custodia.
Las profesionales se manifestaron sobre un caso sucedido en España, pero temen que no sea un problema aislado, ya que conocen varias denuncias de mujeres que pierden la custodia al intentar proteger a sus hijos de padres abusivos.
El pronunciamiento surgió luego de la decisión de un tribunal español que concedió la custodia de una niña de siete años a su padre, a pesar de las acusaciones de abusos sexuales que pesan sobre él.
Es el caso de Diana García M., que recientemente perdió la custodia de su hija tras una decisión de un juzgado de Pozuelo de Alarcón, luego confirmada por un tribunal superior en febrero de 2022.
A pesar de los antecedentes de violencia doméstica y de las pruebas de abusos sexuales cometidos contra su hija durante años, el tribunal de apelación determinó que el padre no suponía un riesgo para la niña y le concedió la custodia completa.
La decisión judicial «pone a la niña en grave peligro y parece ser un error judicial» declararon las expertas.
Un grupo de expertas
El grupo de expertas que hizo la denuncia lo integran: Reem Alsalem, relatora especial sobre la violencia contra la mujer, sus causas y consecuencias; Tlaleng Mofokeng, relatora especial sobre el derecho a la salud física y mental; y Nils Melzer, relator especial sobre la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes.
Y también las representantes del Grupo de Trabajo sobre la discriminación contra las mujeres y las niñas Melissa Upreti (presidenta), Dorothy Estrada Tanck (vicepresidenta), Elizabeth Broderick, Ivana Radacic y Meskerem Geset Techane.
«Nos preocupa profundamente que éste no sea un problema aislado, ya que seguimos recibiendo información sobre casos en España y otros países de madres que pierden la custodia, y a veces incluso se enfrentan a situaciones de encarcelamiento, por intentar proteger a sus hijas e hijos de padres abusivos», coincidieron las especialistas.
Las expertas de ONU señalaron que las y los niños en España siguen expuestos al riesgo de violencia y abuso sexual por un sistema judicial que parece favorecer a los padres en los casos de custodia, incluso en los casos en los que hay antecedentes de violencia doméstica o pruebas de abuso contra los niños y sus madres.
«Pedimos que se tomen medidas urgentes para proteger a la hija de la Sra. Diana García M. del grave riesgo de sufrir daños adicionales, y que se adopten medidas más amplias para evitar que se siga aplicando mal la ley», agregaron las expertas de la ONU.
La decisión del tribunal de apelación en el caso contraviene las normas internacionales, y la jurisprudencia del Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer en el caso Ángela González Carreño vs. España de 2014, así como la decisión de su Tribunal Supremo en consecuencia, del 2018, señalaron las especialistas.
La legislación en España impide conceder la custodia compartida en casos de violencia de género.
«En este caso, ignorar las pruebas de los abusos sexuales contra la niña y de la violencia de género contra la madre, y conceder la custodia al padre es claramente contrario al interés superior de la niña, una obligación fundamental según la Convención sobre los Derechos del Niño», añadieron las profesionales.
El tribunal también argumentó que mantener la custodia de la niña con la madre supondría el riesgo de dañar aún más la relación entre hija y padre, ya que la señora García estaría «induciendo en la menor la creencia de que su padre es malo».
«Tal razonamiento deriva claramente de la utilización de la pseudo teoría de la alienación parental -conocida como sap- a pesar de que su aplicación está prohibida en España por una ley de 2021», profundizaron las expertas.
La alienación parental, una idea desacreditada en los círculos científicos, refleja la creencia de que cuando una niña o niño teme o evita a su padre o madre, se debe a la influencia del otro progenitor, y no a las propias experiencias del niño.
Las especialistas, por último, pidieron con anterioridad al Gobierno de España que demuestre más voluntad para proteger a los niños de la violencia doméstica y los abusos sexuales, que se asegure de que sus tribunales superen los prejuicios contra las mujeres y que aplique un enfoque centrado en la niña y el niño y sensible al género.